viernes, 22 de febrero de 2008

Paseo por mi infancia...

Mis abuelos paternos vivían en una hermosa casa. Entre la reja del frente y la puerta de entrada a la casa había un pequeño espacio en el que los domingos mis abuelos solían sentarse a tomar mate mientras todos sus nietos jugábamos en la vereda.

A la derecha de este espacio había un largo pasillo que conducía hacia el fondo, donde había un patio/lavadero. Mi entretenimiento cuando íbamos de visita era ir y venir por este pasillo, yendo y viniendo del patio al frente una y otra vez. Mis primeros pasos los dí en ese lugar.

Cuando tenía aproximadamente 5 años mis abuelos vendieron esa casa y se mudaron, por lo que no son muchos los recuerdos que me quedaron en la memoria. Siempre recordaba que entrando a la casa y a la izquierda estaba el living comedor, con un techo altísimo que permitía que el lugar estuviera fresco incluso en verano. Si en lugar de girar a la izquierda se giraba a la derecha, estaba la cocina. Y si en lugar de girar seguía derecho, me encontraba con la escalera que llevaba a la planta alta de la casa, lugar del que no tengo recuerdo alguno ya que la escalera era sumamente empinada y a los chicos no nos dejaban subir.

Hace unos meses con mi vieja estábamos cerca y me pidió si la podía llevar para pasar por la puerta y ver cómo estaba este lugar que siempre recordamos con mucho cariño y cierta nostalgia.

Estacionamos el auto en la puerta. El frente de la casa estaba bastante cambiado. En donde mis abuelos se sentaban a tomar mate, había un enorme cantero lleno de flores de colores. El pasillo por el que yo corría cuando era chico no se veía, estaba tapado por una puerta. Desde adentro de la casa miraron por la ventana, y le dije a mi vieja "se van a asustar...mejor corro el auto". Pero este lugar era como un imán que no dejaba de atraernos.

Una mujer salió de la casa y miró hacia dónde estábamos, por lo que le pedí a mi vieja que se baje y le explique la situación. Bajó del auto, se acercó a la reja y le explicó a la mujer que mis abuelos habían vivido allí. "Ah...los B?".

Mis abuelos habían vendido la casa a un constructor, que poco tiempo después se la vendió a esta mujer y su marido. "En cada lugar en el que vivimos siempre nos gustó averiguar sobre los antiguos dueños" nos contó. Y fue así que por aproximadamente 15 minutos estuvimos hablando de la familia.

"Le hago una pregunta...que hacían en el cuartito que hay en el descanso de la escalera? Porque cuando lo restauramos encontramos una llave de gas y el piso con quemaduras muy chiquitas".

"Ese cuarto fue el taller de mi suegro" le contó mi vieja. Mi abuelo pasaba horas en ese cuartito soldando hebillas de cinturones y carteras. Ese era su trabajo.

"aaah...ahora entiendo porqué había esas quemaduras tan chiquitas en el piso"

De repente, sin que nosotros lo pidiéramos, la mujer nos invitó a pasar y recorrer el lugar. Con mi vieja nos miramos y la mujer insistió. "Por favor, en serio..."

Nos mostró el living que yo recordaba entrando a la izquierda, con algunas ventanas nuevas, pero con el techo tan alto como yo lo recordaba. Nos llevó a la planta alta, pasando por la piecita del descanso de la escalera donde mi abuelo tuvo si taller. En la planta alta nos mostró su cuarto, que había sido el cuarto de mis abuelos, y nos mostró las demás habitaciones...que habían sido de mi viejo y mi tío, y de mis dos tías. Bajamos y nos mostró la cocina. Allí estaba la misma mesada de mármol que yo recordaba, el mismo mueble verde donde mi abuela guardaba las galletitas para mis meriendas.

En todo este trayecto mi vieja no paraba de contarle a la mujer cosas sobre la época en que mis abuelos vivían allí y de preguntarle por la gente del barrio. Cada 5 minutos se emocionaba y mientras le caían las lágrimas decía "cuando le cuente a mis cuñadas, a mi cuñado y a mis sobrinos..."

Salimos al patio del fondo, y automáticamente giré a la derecha en busca del pasillo en el que dí mis primeros pasos, por el que tantas tardes de domingo corrí yendo y viniendo. Ahí estaba.

La miré a mi vieja...ella me miró...me acerqué más al pasillo y apoyé mis manos en la pared como si estuviera acariciándolo con las mismas manitos que se sostenían allí para no perder el equilibrio.

Volvimos a mirarnos, no necesité decirle nada. Las lágrimas que rodaban por mis mejillas lo decían todo...

19 comentarios:

Belo dijo...

Tonto! se me cayeron unas lagrimitas!
Que emotivo!

Manón dijo...

oh! cada vez que paso por la vereda de la casa del patio con parra, y la veo tan cambiada, tan otra, tan fea, tan ajena... me dá una tristeza profunda. Sé que el patio no es el patio, que la escalera caracol naranja no está más, que la parra y sus uvas como ciruelas no está más, que nada se parece a lo que era.

Y me pasó lo mismo con el patio de mi escuela, hice un post sobre él y la decepción que me llevé cuando lo encontré TECHADO.

Qué linda emoción haberse encontrado con su infancia en las mismas paredes...

un abrazo.

Mayfair dijo...

Ya lo descubrí, te gusta hacer llorar a la gente. Encima con "The silent man" de fondo y me acordaba del alquiler en que vivimos con mis viejos por 4 años y cada vez que pasamos con el auto por ese lugar no puedo dejar de mirar la casa, como si pudiera meterme adentro con solo mirarla.
Escribís muy bien, me pusiste nostálgica :)
Suerte!

La Incondicional dijo...

Me hiciste dar ganas de pasar por la casa de mi abuela paterna. Hace tanto que no paso por ahí que ya estoy empezando a olvidar como era por dentro.

Barbie dijo...

Mi papá es de Colón E.R. Mi abuelo falleció en el 2001 pero el año anterior, por esas cosas de la vida, busque la casa en donde el creció y de la que tantas historias conocía. Me pasó exactamente lo mismo, por eso entiendo tu emoción, la dueña me hizo pasar y recorrer sus rincones. El día del padre, cuando fui a visitarlo, le dije "tengo algo para vos" y lo lleve .
No hay vez que vaya a Colón en la que no vuelva a esa casona... ahí vive la imagen de mi abuelo que aunque enfermo pudo correrse del dolor para compartir conmigo sus niñez...
Gracias por recordarme esta emoción y por demostrarme que no soy la única a la que le gusta revivir estos recuerdos que nos hacen felices... Voy a postear sobre ello...

Anfitrite dijo...

ESTO NO SE HACE!!!!!! Te das cuenta de que terminamos todas llorando??????
Excelente. Me hiciste recorrer cada rincón de esa casa. Y te vi, con las manos chiquitas tocando esa pared.

Beso, beso, beso...

yo, mamuchi dijo...

Solo puedo decir que te felicito, porque en tus palabras hay un poco de las mias tambien, te felicito por que te das permiso para recordad, y en ese recuerdo lograstes que todos soñemos un poco

yo, mamuchi dijo...

Solo puedo decir que te felicito, porque en tus palabras hay un poco de las mias tambien, te felicito por que te das permiso para recordad, y en ese recuerdo lograstes que todos soñemos un poco

Pachu dijo...

Me emocionè hasta las làgrimas...lo contaste de una forma tan natural, tan simple....me retrotrajo a mi infancia...
Un lindisimo viaje al pasado...me encantò

Zeb dijo...

Belo: Perdón! No era la intención, pero gracias por emocionarte conmigo!

Manón: Alguna vez leí q cuando uno visita un lugar de su infancia ese lugar ya no es el mismo, xq el q cambió fue uno...y siempre estuve de acuerdo con eso, hasta que viví lo que acá les cuento.

Mayfair: Gracias por tu comentario. No me gusta hacer llorar a la gente, pero si de alguna forma logré llegarles a quienes me leen, me siento más que satisfecho :o)

Incondicional: No se quede con las ganas! Pase y recuerde!

Barbie: te comenté algunas cosas en tu blog. Gracias a vos por leerme.

Anfitrite: Gracias por tus palabras. Soy muy crítico con mi forma de escribir...si llegaste a verme, misión cumplida!

Mamuchi: Gracias!

Pachu: Gracias por tu comentario sobre mi forma de contarlo! Bienvenida! Te espero cuando gustes!

Gracias a todos por recordar conmigo.

Jok€r dijo...

que lindo lo que escribiste se nota mucho que querias mabas esa casa, la forma de narrarlo y el sentimiento que le pones, que bueno que te dejaron pasar, a mi me gustaria volver a ver mi ex casa (depto osea q es mas dificil entrar) y no c por que mi jardin... (cosa que cuando quise entrar no me dejaron por que no sabian quein era ya intentare de nuevo!) muy lindo post es lindo recordas nostalgias viejas y aun mas volver a vivirlas (auqnue estemos maas viejos ) un abrazo te leo

El MeLLi dijo...

Que flash, muy groso debe ser. Yo vivi casi toda mi vida en el mismo lugar asi que nunca vivi algo asi.

Pero recuerdo hace unos años, pase con una ex novia por Miramar y ella me pidio que la lleve a la casa que tenía el abuelo (que habia muerto) allá y la encontró re cambiada. Se puso re mal.

Anónimo dijo...

Te leí y termine con piel de gallina. Yo siempre quise volver a mi primer casa, ver si todo era como parecía, ver si habían cambiado demasiado por dentro.

Dicen que uno siempre vuelve a los lugares donde fue feliz...

Lulis*~ dijo...

ufff nene, para de hacer llorar a las chicas!

emocionante la verdad... me quede con la imagen de tus manos tocando esa pared... muy fuerte.

yo volvi a vivir en la casa de mi infancia, por unos años vivi en otra ciudad, y la sensacion que te da "volver" es increible. puede que esta todo cambiado, hasta en la parte edilicia, pero el sentimiento es siempre el mismo.

besosssss (si, volvi)

Diseño y Planificación Comunicacional dijo...

Bello relato Zeb!

Roky Rokoon dijo...

la vez que volvi a mi primer casa
me puse a llorar como un niño
es algo que no se puede describir, un vacio enorme

yo dijo...

ahhh yo no volvi a mi 1º casa, que en realidad era un departamento, o sea, sería muuuy dificil volver y tocar el portero y ponermse a explicar..Sé que la remodelaron toda...ya no debe quedar mucho de lo que era antes. Por ahora prefiero no volver porque me mudé hace un par de años y me costó mucho despegarme.
Por suerte, veo que todos tenemos lindos recuerdos de nuestras infancias y me sumo a l club de las lloronas....(la música ayuda).
Saludos! :)

Zeb dijo...

Joker: Tengo el mejor de los recuerdos de esa casa...y la sensación cuando puse un pie dentro de ella fue sublime. Nos leemos!

Melli: Tal cual, fue realmente groso. Garrón lo de tu ex...creo q me hubiera pasado lo mismo si ese pasillo no hubiera estado cuando lo fui a buscar.

Pau: Yo creo q uno nunca termina de irse de los lugares donde fue feliz...algo de uno queda allí...y algo del lugar queda en uno.

Lulis: No era mi intención el llanto generalizado! Viste lo q es cuando uno "vuelve"? También me pasó la última vez q visite el depto de mis abuelos en mardel...cuando hubo q ponerlo en venta. beso!

Recontra: Gracias!

Roky: Porq uno no deja de sentir q ese lugar sigue siendo propio...no?

Lau: Sí...en depto se complica más...salvo q el portero del edificio te recuerde, te reconozca y ayude...pero lo veo complicado. Perdón por las lágrimas, no era la intención! Beso!

Pachu dijo...

hola zeb! te dejè un premio para que retires en mi blog! besos